NUESTRO OBJETIVO
Nuestra Institución nace en Paraná, en Marzo de 2005, como fusión de dos Instituciones que venían bregando por la dignidad de la persona, categoría a la que accede por sólo hecho de ser tal. Esta condición que por ser intrínseca, supone sea espontánea, es quizás una de las más portergadas en el andar diario.
La palabra Dignidad deriva del adjetivo latino dignus, a, um, que se traduce por "valioso"; y es el sentimiento que nos hace sentir valiosos, sin importar nuestra vida material o social.
Por ella toda persona tiene que reconocer las diferencias y además tolerarlas para que la persona digna se sienta libre, y actúe consecuentemente.
Es el valor intrínseco y supremo que tiene cada ser humano, independientemente de su situación económica, social y cultural, así como de sus creencias o formas de pensar.
El ser humano la posee, nadie se la da. La tiene desde el mismo instante de su concepción, nadie se la puede quitar bajo ningún pretexto.
Esta consideración hace sonar como ilógico nuestro objetivo : PROMOVER LA DIGNIDAD. ¿Cómo luchar por algo que se tiene por sólo ser?
La explicación es simple, en nuestra sociedad existen objetivos que transgreden tal capacidad y quita la igualdad dada por este parámetro estableciendo categorías que permiten clasificar a las personas en rango de validez.
Esta realidad es la que hizo que para justificar la esclavitud se dijera que el esclavo no era persona humana, sino un objeto, al igual que judios, gitanos y homosexuales durante el nazismo. En la época del colonialismo, se decía del indio, que no tenia alma y por lo tanto no poseía dignidad humana.
Es una constante en la historia de la humanidad, negarla para justificar y justificarse en los atentados contra ella.
La dignidad es por lo tanto algo propio a cada persona, pero su ejercicio depende de la conciencia que tengamos de ella y las posibilIdades de ejercerla, desautorizando a quienes categorizan.
Discapacidad, capacidades especiales son categorías; palabras que se ensayan para expresar a aquellas personas que no pueden definirse dentro de las normas generales que maneja nuestra sociedad. Las palabras usadas con anterioridad utilizaban el prefijo de negación a, entonces encontramos en la literatura antigua vocablos tales como anormal, aminorado...
Este nuevo ensayo es para nosotros una forma más de definir desde las diferencias, por esto decidimos decir que bregamos por la dignidad y no tememos decir que abordamos la discapacidad y la marginalidad, pues estas diferenciaciones se presentan como consecuencias de una sociedad que niega este valor propio al hombre y debe definir las diferencias para poder volver a plantearla.
En este encuentro pretendemos desmitizar estos términos hablando de sociedad o sea de conjunto de individuos que comparten fines y que se relacionan interactuando entre sí, cooperativamente, para formar un grupo o una comunidad,
Hasta hace poco tiempo nuestras comunidades mantenían un cierto equilibrio, pues definían sus fines y sus acciones cooperativas teniendo en cuenta categorías establecidas desde las diferencias cronológicas, niños- escuelas, adultos jóvenes- acceso al mundo del trabajo, ancianos- sistema de salud, geriátricos.
Hoy nos enfrentamos a una nueva realidad. Los avances científicos han determinado consecuencias múltiples. La educación se ha visto enriquecida por una mirada neurológica que nos presenta un ser que pude aprender más allá de diferenciaciones, la psicopedagogía y todas las disciplinas que abordan esta temática han comenzado una lucha contra aquellos daños que antes sumergían a la persona en un mundo de imposibilidades. A su vez la medicina logra luchar contra enfermedades que antes ocacionaban la muerte y da nuevas oportunidades a personas que muchass veces quedan lesionadas pero no son consideradas como incapacitadas,
Esta realidad modifica el término comunidad pues ingresa al proceso de interacción personas con modos de ser diferentes y muchas de ellas se presentan como defensoras del espacio que les corresponde como ser humano, o son representadas por familiares o sectores sociales que las representan..
Este cambio tan significativo, moviliza a las bases y exige hoy de un reordenamiento de las organizaciones que garantizan la organización social.
Hasta hace poco tiempo algunas comunidades sentían satisfechos sus espacios con la respuesta generada desde el ámbito educativo. La escuela especial fue una de las herramientas primeras que generó un espacio de interacción que garantizó que el todo esté interactuando. Hoy está respuesta es insuficiente, porque el único modo de interactuar no es el pedagógico, se necesita establecer espacios multifacéticos y diferenciados, en el cual la persona reciba de la comunidad la posibilidad de acceder a la interacción que la dignifique en su diferencia.
Desde la Fundación pudimos entender que este sentir sólo puede atravesar a la persona y a la familia que desea interactuar, pues son ellas quienes vivencian la imposibilidad de acceder al espacio total. Creemos que no se trata de luchar por los derechos sino simplemente ejercerlos; transmitir el sentir, formar grupos que puedan expresarlos y comenzar a vivirlos con la seguridad que la comunidad es de todos.
Quién lucha por ingresar a un lugar que le pertenece, reconoce que no lo tiene.
Es por esto que nuestro andar consiste en promover la formaciónde grupos de padres, familias, personas... que se constituyan con una identidad propia. Ponemos a disposición de ellos nuestra experiencia y acompañamos en el planteo de un espacio que garantice la puesta en marcha de una interacción efectiva.
